viernes, 22 de octubre de 2010

Cuando Decidimos Ser Diferentes

Recuerdo que cuando tenía como 15 años más o menos un vecino que es estilista y homosexual (Lo saludo si algún día mira este blog, aunque lo dudo jajaja) pasaba encantado porque yo me hacía diferentes clases de peinados locos y llamativos y entre en épocas de vestimenta rara como hippie o trashera pero lo que tocó realmente mi vida cuando tenía 19 años fué un documental Chileno acerca de los góticos.
No sé si realmente podría expresar con palabras lo que sentí en ese momento pero encontré en el documental a un grupo de gente que me encantó más allá de por su vestimenta: Por su cultura y sus costumbres; y desde aquel momento me esforcé cada día por adentrarme en esa sub cultura que había tocado mi estilo y mi vida.

Comencé a buscar información acerca de los godos y el arte gótico y abrí un foro en el que conocí a mucha gente de diversos países y fué allí cuando comencé a darme cuenta de que la sub cultura gótica reflejada en el mundo en que vivía era mucho menos de las expectativas que realmente conocía. En mi país sólo hay gente estúpida y vacía que no pueden hablar nada inteligente y en realidad pensé que sólo era en mi país pero en muchos lugares existe la ideología vacía fuera de lo que yo imaginaba que era realmente el gótico.

Mi esposo es metalero y me encanta cómo se lleva con su mara y todo el conocimiento que ellos tienen porque la música realmente los apasiona y les interesa a tal punto que hablan de música, letra y del buen gusto que tiene que haber en la música y no miento si afirmo que me encantaría encontrar personas con las cuales pudiera compartir las mismas cosas pero de mi sub cultura. Sueños como crear un bar gótico con noches bohemias y llenar las paredes de cuadros e información es algo con lo que me he ilusionado desde hace muchos años y aún no pierdo esa esperanza.

Hay un bar llamado RUST IN PEACE que cerrará el próximo fin de semana y me encantaría que hubiera más lugares así en lugar que cerraran los pocos que hay. Miro los conciertos de Wacken o en otros lugares fuera de América y observó como la gente va a disfrutar la música y las bandas que los deleitan con su talento y no se drogan o alcoholizan y terminan tirados en la calle mucho antes de que siquiera comiencen los conciertos patenado como mulas y empujándose como manada de animales descontrolados para luego presumir que asistieron a no sé cuántos conciertos.

Es triste pero debemos atenernos y trabajar duro si queremos asistir a un concierto decente y ser diferentes para nosotros mismos para no tener una vida vacía.

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